Muffins de Mikado sin gluten

Socreammmmyyyyyyyyyss!

Hoy os traemos una deliciosa y dulce receta como son los cupcakes de mikado sin lactosa!Super irresistibles!!!

Os animamos desde SoCreamy a que la probáis. El modo de preparación es para hacerla desde con la Thermomix.

Ingredientes: (para 12 cupcakes)

* Para las magdalenas:

– 120 gr. de harina de repostería sin gluten

– 40 gr. de cacao puro en polvo

– 1 y ½ cucharaditas de levadura química en polvo

– 1 huevo grande

– 180 gr. de azúcar

– 60 gr. de aceite de girasol o aceite de oliva suave

– 80 gr. de leche entera sin lactosa

– 1 cucharadita de extracto de vainilla

– 75 gr. de agua hirviendo

– 1 paquete de Mikado (75 gr.)

* Para la crema de chocolate:

– 200 gr. de mantequilla a temperatura ambiente

– 200 gr. de azúcar glas

– 150 gr. de chocolate negro troceado

* Para decorar:

– 1 paquete de Mikado (75 gr.)

La preparación es muy facilita!

Preparación:

1.- Magdalenas de Mikado:

Precalentamos el horno a 180º y colocamos las cápsulas de papel dentro de moldes de silicona para magdalenas o en un molde de aluminio para 12.

En el vaso de la Thermomix ponemos la harina, el cacao y la levadura. Mezclamos durante 10 segundos, a velocidad 6. Reservamos en un bol.

Sin lavar el vaso, echamos el huevo, el azúcar y el aceite. Programamos 1 minuto, a velocidad 3.

Añadimos la leche y la vainilla. Programamos 30 segundos, a velocidad 3.

Agregamos el agua hirviendo (yo caliento un vaso con agua en el microondas hasta que hierva y antes de echarlo en la Thermomix, pulso la tecla “balanza” para echar sólo los 75 gr. que necesitamos) y programamos 20 segundos, a velocidad 3.

Incorporamos la mezcla de harina, cacao y levadura reservada. Mezclamos durante 20 segundos, a velocidad 3.

Echamos los Mikados en trozos y mezclamos con la espátula para que todo quede bien integrado.

Vertemos esta mezcla en las cápsulas llenándolas hasta la mitad más o menos.

Horneamos durante 22-25 minutos, a 180º.

Sacamos del horno y con cuidado de no quemarnos retiramos las magdalenas de los moldes de silicona o del de aluminio. Dejamos que enfríen completamente sobre una rejilla.

2.- Crema de chocolate:

Lavamos y secamos el vaso y la tapa. Mientras se hornean los cupcakes, hacemos la crema que tendrá que reposar durante 20 o 30 minutos en el frigorífico para que coja consistencia.

Ponemos la mantequilla a temperatura ambiente y el azúcar en el vaso y programamos 4 minutos, a velocidad 3. Con la espátula, separamos la crema que haya en las paredes y volvemos a programar 1 minuto, a velocidad 3.

Mientras batimos la mantequilla y el azúcar, echamos el chocolate en un bol y lo calentamos en el microondas durante 30 segundos. Lo revolvemos con una cuchara y volvemos a programar 20 segundos más, revolvemos y así vamos calentándolo hasta que esté derretido (hay que calentarlo poco a poco para que no se queme).

Echamos 100 gr. de chocolate fundido y templado en el vaso (el resto lo utilizaremos para decorar los cupcakes) y programamos 3 minutos, a velocidad 3. Con la espátula separamos la crema que haya pegada en las paredes, revolvemos un poco y volvemos a programar 30 segundos, a velocidad 3.

Vertemos esta crema en una manga pastelera con boquilla de estrella y lo reservamos en el frigorífico hasta que coja consistencia y podemos decorar los cupcakes.

Una vez los cupcakes estén completamente fríos y la crema esté en su punto, los decoramos haciendo círculos desde el exterior hacia el centro, en el sentido de las agujas del reloj.

Cogemos un poco del chocolate fundido que nos ha quedado con una cuchara pequeña y echamos tiras finas de chocolate sobre los cupcakes, poniendo la cuchara encima de ellos con algo de distancia y moviéndola de un lado a otro mientras caen los hilos de chocolate.

Decoramos los cupcakes con Mikados partidos por la mitad. Clavamos 2 mitades en cada cupcake.

Ya sabéis que podéis compartid vuestras recetas y experiencias a través del hastag ‪#‎yosoycreamy‬

Un besito a todooos muy creamyy!!! muakkk Emoticono heart

Cuando llega el momento en el que los papeles de los personajes se intercambia, el momento en el que él no es él, y yo no soy yo. Las cosas han cambiado, y estamos de acuerdo. Pero que no venga y empiece a jugar en una mesa de juegos en la que no importa que haya sentimientos encima. Que se quede con los buenos momentos.

Le gusta la comida mexicana, las pizzas. Le encantan los veleros, el mar, la playa. Le gusta dejar sus huellas en la arena mojada. El vapor protagoniza sus calientes duchas, y suele escuchar canciones lentas. No le gusta el helado de menta, ni el de albaricoque, ni el de chocolate y tiene prohibido el de nueces con nata. Ella tiene mil pantalones vaqueros, pero sólo uno le queda bien. Nunca sale de casa sin echarse perfume. Se muerde las uñas, pero lo odia. No fuma. Se vuelve loca en la pista del baile. Conoce a mucha gente. Tiene amigos, pocos. Ha estado enamorada. Volvería a enamorarse. Su helado favorito, el de piñones con nata y caramelo. Se operaría de orejas. Tiene sentido del humor, mucho. Tiene poco pecho. Sabe excitar a los hombres. Quiere tener tres hijos y escribir un libro. Dicen que tiene la sonrisa bonita y una muy mala letra. Tiene una manchita en la paleta izquierda. Ha tenido brackets. Le encanta su nombre, y sus apellidos. No sabe guiñar el ojo derecho, ni hacer el pino, ni la ''U'' con la lengua. Pero sí sabe hacer reír. Le gustaría tener un perro, un beagle. Adora a su familia. Se pelea con su hermano demasiado. Le gustan los pistachos. Sus colores favoritos son el verde lima, y el negro. Es Libra. Tiene un lunar en la mano izquierda. Y sobretodo, es feliz.

Querer algo con muchas ganas y no tener ni la tercera parte.

Y no lo niego, claro que te imagino cuando comes un helado, o las veces que pulsas el pulverizador de tu rutinario perfume antes de salir, o incluso me encantaría saber por cuanto tiempo te quedas en el espejo por las mañanas al levantarte.
Pero ese es exactamente el problema, que no quiero imaginarlo. Quiero vivirlo en primera persona. Quiero estar ahí, muy muy cerquita tuya, hasta que se te derrita el helado y la nata empieze a mancharnos, hasta que tu perfume se funda con tu piel y creen una perfecta y dulce capa homogénea. Y quiero estar ahí, quiero estar al lado tuya cuando estés frente del espejo. Mírate, mírame, míranos.

Quiero verte en mi cama cuando cuente tres. 
1..2..

3.

-Cuando empieces a notar ese pellizco en las entrañas, y ese nerviosismo sin motivos. Cuando tu pensamiento lo invade sin respetar horarios, cuando el mejor momento del día sea su sonrisa, y el mejor silencio de la noche sea su mirada...
Entonces amiga, estas perdida.-